3. JUEZ DREED

JUEZ DREED

(JUDGE DREED, 1995) 92´                                                                            DANNY CANNON

“Yo soy la ley.”

Dreed

Adaptación del tebeo creado entre otros por el español Carlos Ezquerra que supone un interesante aunque fallido intento de trasladar el universo plasmado en las viñetas del cómic 2000 AD a las pantallas de cine, siendo su principal lastre el contar con una estrella como Stallone para dar vida al juez Dreed, lo que hace la película esté al servicio del actor y no al del personaje al que este interpreta.

Con un cuidado diseño de producción en todo lo que concierne a la estética de los escenarios, armamento o vestuario, la trama de la película trata de abarcar demasiados elementos de los tebeos, lo que provoca acabe fracasando por esa amplitud de miras. Tampoco ayuda el tono de autoparodia presente en la cinta, especialmente visible en el papel del cómico Rob Schneider, pero también en la concepción del propio Dreed, creado en este caso a semejanza de los héroes de acción de la época, siempre con una frase hecha para cada ocasión.

Una pena que todo lo bueno que tiene la película acabe diluido por una historia fallida y un concepto final que trata de abarcar a un público mayoritario, obviando por el camino la propia esencia del personaje.

ME GUSTA: La escena que recoge los diferentes ataques a los jueces, bien montada y narrativamente muy funcional.

NO ME GUSTA: Como desaprovecha a actores de la valía de Diane Lane, Jürgen Prochnow o Max Von Sydow, de juzgado de guardia.

FRASE RESUMEN: Dreed se amolda a Stallone y no al revés.

DREED

(DREED, 2012) 95´                                                                                               PETE TRAVIS

“Solo una cosa pelea por el orden en medio del caos, los Jueces.”

Dreed

Veinte años después de la versión más  colorista del personaje protagonizada por Stallone, llegaría este nuevo enfoque que deja de lado las contemplaciones y nos presente un futuro abiertamente deshumanizado, brutalmente violento y totalmente anárquico, encajándonos a un Dreed que, esta vez si, es fiel al concepto de los tebeos que lo alumbraron partiendo de un hecho tan básico como trascendente, en ningún momento vemos el rostro del actor protagonista bajo el casco del juez Dreed.

Consciente de su limitación presupuestaria la película juega sus bazas en presentar una película muy potente visualmente, con las impresionantes secuencias rodadas en slow motion como referente estético principal, y que golpea la pantalla a base de una violencia sin cortapisas. La historia, básica y de un único escenario, funciona a las mil maravillosas, perdonándosele incluso algún fallo como tiene.

Cinta repleta de testosterona y violencia que sin embargo se presenta bajo una estética en ocasiones tan preciosista que te acaba maravillando, no importa que lo que estes viendo es a un tipo a quien una bala le atraviesa el rostro. Puro Dreed.

ME GUSTA: Que el personaje de Anderson, interpretado por Olivia Thirlby, tenga su peso en la historia y no se limite a ser mera comparsa del protagonista.

NO ME GUSTA: El final de una antagonista con el potencial de Ma-ma, demasiado precipitado, y nunca mejor dicho.

FRASE RESUMEN: Una película repleta de tipos (y tipas) duros.